Nunca he visto con buenos ojos el trato arrogante de los británicos con respecto a los del "continente", su arrogancia y creída superioridad en todo, pero tengo que manifestar mi profunda pena porque no podamos construir una Europa nueva y moderna porque un gran trozo de ella se niega a reconocer que vivimos en un mundo globalizado donde todos deben participar en lograr unas metas comunes.
Lo sucedido en la Gran Bretaña, egoísmo, falta de unidad, encasillamiento en ideas cerradas, extremismos, es lo que seguramente se vivirá en Españistán en este día electoral de hoy, donde por mucho que la ciudadanía exprese sus apoyos a uno u otro partido, nos encontraremos en la situación de partida, donde nadie se pondrá en la piel del otro, y seguirán arrojándose piedras porque la política nacional prefiere el revanchismo al pactismo, el diálogo, la unidad, en pensar en un futuro mejor para todos. Una vergüenza, igual que lo ocurrido en las islas Británicas.
Menos mal que hay algunos que lo tienen muy claro y lo manifiestan muy, pero que muy claro (tomado del Twitter):
En países donde la zafiedad, la incultura, el despego a valores comunes, el desarraigo y la pobreza imperan, es imposible evitar el cataclismo social y el imperio de la sinrazón. Que tomen nota los políticos!. Javier
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